junio 06, 2017
El presidente de la SGI insta a la adopción del Tratado de Prohibición Nuclear antes de la segunda ronda de negociaciones de la ONU
“Las armas nucleares son capaces de devastar el género humano y el ecosistema planetario, y su amenaza, no hace más que agravarse. El objetivo de las próximas deliberaciones es lograr avances sustanciales que reviertan tal situación.”, escribe el presidente de la SGI Daisaku Ikeda en un ensayo publicado en The Japan Times, antes de la segunda ronda de negociaciones sobre un tratado para la prohibición de las armas nucleares que tiene lugar en la sede de la ONU en Nueva York desde el 15 de junio de 2017.
“El antagonismo nuclear existente es producto de procesos históricos específicos. No es una condición dada e inalterable del orden global.”, dice, instando a que la adopción de la convención que prohíba las armas nucleares –cuyo borrador fue lanzado en mayo después de la primera ronda de vigorosos debates de la sociedad civil y 130 estados miembros de la ONU-, constituiría un impulso decisivo para el cumplimiento de las obligaciones de desarme del Tratado de No Proliferación Nuclear (TNP) y generaría un impulso decisivo para la abolición de las armas nucleares. “Y es por lo tanto vital que esto se consiga al final de la segunda sesión de negociación el 7 de julio”.
Ikeda también expresó su pesar por la ausencia de casi todos los países que dependen de la disuasión ampliada de los aliados nucleares en la primera ronda de negociaciones y afirmó también que la participación en las próximas sesiones, en particular la de Japón, resultaría crucial.
“El deseo de paz de Hiroshima y Nagasaki constituye el ansia de que ningún otro país sea blanco ni causante de un ataque nuclear. Un tratado de prohibición de armas nucleares establecería una norma compartida por la humanidad y Japón tiene la misión de hacer todo lo posible para consolidar dicha meta”, escribe.
[Leer el texto completo “El tratado de prohibición ofrece una oportunidad para un mundo sin armas nucleares.”]
[De la edición del 7 de junio de 2017 del Seikyo Shimbun, Soka Gakkai, Japón]