noviembre 19, 2015
La Universidad Tecnológica Chienkuo de Taiwán, hace entrega de un grado honorífico
Sesión de fotos conmemorativa tras la concesión del grado de Profesor Emérito Honorífico conferida a la delegación enviada por el Señor Ikeda.
La Universidad Tecnológica Chienkuo (UTC), concedió a Daisaku Ikeda, fundador de la Universidad Soka, el grado de Profesor Emérito Honorífico en reconocimiento a su búsqueda de la paz y desarrollo de una sociedad humanista, así como por su contribución a la educación y la cultura. La ceremonia, celebrada por poderes, tuvo lugar en el campus de la UTC el 19 de noviembre de 2015, conmemorando el 50º aniversario de la Universidad, y contó con la presencia del director de la UTC, Lien-Hsing Wu; el rector, Farn-Shing Chen; el miembro de la junta directiva, Ming-Jye Wu; decanos de facultades y miembros, así como 180 representantes del alumnado. El director de la junta directiva de la Universidad Soka, Yasunori Tashiro, recogió el premio en nombre del señor Ikeda.
Fundada en 1965, la Universidad Tecnológica Chienkuo ha contribuido durante el último medio siglo a la sociedad taiwanesa y a su economía, forjando a competentes y dedicados profesionales en los campos de la ciencia y la tecnología, tal y como se establece en su misión fundacional.
El director de la UTC, el señor Wu, elogió el liderazgo del presidente Ikeda como fundador de la Universidad Soka por forjar individuos capaces que están contribuyendo a la paz mundial en sus respectivos campos con una visión global. Señaló que el título de Profesor Emérito Honorífico se le concedía al señor Ikeda como tributo a sus importantes contribuciones al desarrollo de la civilización humana y a la paz mundial, así como al avance de los intercambios culturales y educativos.
En su mensaje de aceptación, el presidente Ikeda expresó su aprecio por ser acogido en la UTC en una ocasión tan especial como la de su 50º aniversario. Asimismo, citó tres aspectos en los que la UTC le ha inspirado: en primer lugar, el espíritu de allanar el propio camino, cuestión que refleja la convicción de Sun Yat-sen (1866-1925), padre de la China moderna, de que las aspiraciones fuertes conducen al éxito. En segundo lugar, la creencia central de la UTC de que forjar individuos capaces es la base de todo, cristalizada en el objetivo educativo de la universidad de ayudar a los estudiantes a desarrollar su erudición, sus habilidades innatas y su actitud compasiva.
En tercer lugar, el deseo de la UTC de ayudar a los estudiantes a dar rienda suelta a su potencial ilimitado enfocado en la innovación creativa. El presidente Ikeda concluyó su mensaje señalando que en la sociedad global de hoy, trabajar de forma conjunta a través del intercambio educativo nos inspirará para comprometernos a participar en una competición amistosa que genere ciudadanos del mundo sobresalientes, rebosantes de esperanza renovada y creatividad.
La ceremonia de concesión finalizó con el eco del formidable espíritu de desarrollo compartido por las dos universidades: "las personas capaces son los tesoros de la sociedad, la educación es la base para la paz."
[Adaptado a partir de un artículo publicado en el número del 20 de noviembre de 2015 en el Seikyo Shimbun, Soka Gakkai, Japón]